M M M, Amor Eterno, M M M.
La nueva cinta de Jean-Pierre Jeunet, mi director francés favorito, es este cuento sobre la esperanza que se antepone a la guerra y la desgracia. En plena Primera Guerra Mundial dos jóvenes se atreven a amarse desde temprana edad, Manech y Matildhe, pero la crueldad de la guerra los separa cuando obligan a Manech a enlistarse al ejercito para que varios meses después Matildhe reciba la noticia de su muerte en el frente. Sin embargo ella intuye en su corazón que el aún no ha muerto y se aferra a esa leve esperanza para iniciar una intrépida busca y aclarar el misterio de una cruel batalla contra los Alemanes, donde se supone pereció su amado Manech, echando mano de un simpático detective privado apodado el metiche y haciendo cómplices a su familia, su cartero y a cualquier personaje que se interponga en su camino. Incluyendo al que interpreta Jodie Foster, quien atraída por el talentoso director le pidió la oportunidad de trabajar con él, sin importar el tamaño y la importancia de su participación.
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