La Obsesión de Jack.

El score de la cinta, interpretado por una banda escolar de... ¡percusiones y xilofonos!

Los 50 Millones de Dólares recabados por El Extraño Mundo de Jack no fueron suficientes para considerarla una cinta exitosa, sin embargo cuando la versión en VHS salió a la venta, el éxito de la cinta fue creciendo contundentemente hasta convertirse en un objeto de culto. Y aunque dicen los que saben, el culto lo iniciaron los “darkies” y “punketos”, Jack se ha vuelto venerado por chicos y grandes.

Tanto los aparadores de prestigiosos centros comerciales, hasta los puestos ambulantes de las pulgas y mercados se han visto beneficiados de una extensa gama de productos con la cara o figura de Jack, o cualquier otro personaje de la película, desde figurillas de acción, ropa, mochilas, peluches, disfraces, decoración de Halloween, series de foquitos, hasta los objetos mas inimaginables como relojes, calculadoras, chamarras, pantunflas, brazaletes y hasta estuches para celulares… Todo puede convertirse en un preciado objeto del deseo por sus fans, incluso por aquellos que ni siquiera han visto la cinta.

Pero para aquellos que si la vieron y no se conforman con solo eso, hay todo un universo expandido, para continuar deleitándose con los personajes, con dos juegos de video, una serie de manga, un juego de cartas y los fans que se vuelcan en los millones de paginas que existen en la red sobre el tema, se queman las neuronas tratando de imaginar una continuación en la historia, a tal grado que a circulado una imagen, en la que Jack y Sally, la pareja protagonista de la historia, abrazan a su pequeño hijo.

This is Halloween, versión Marylin Manson.

Estos fans, quizás, son lo que corrieron a ver El Cadáver de la Novia, cinta en que se repitió el equipo creativo y el estilo, de la cual, muchos, resultaron decepcionados, pues esperaban encontrarse ante una cinta similar a El Extraño Mundo…

El rey calabaza, es parte ya, de la cultura popular norteamericana y de muchas otras latitudes, tanto que no es extraño ver en televisión referencias a la cinta, incluso los de Blink 182 hicieron una canción de amor utilizando metáforas del universo “jackiano”…

¡¿Pero por qué tanta euforia por Jack?! Fácil, todos alguna vez hemos sido Jack. Aquí les presento mi pequeña teoría freudiana.

A lo largo de la cinta el protagonista de la historia pasa por tres estados de animo, que todos hemos experimentado alguna vez en nuestra vida.

What's this?, versión Fall Out Boy.

Depresión.

Jack, es el rey de su mundo, un lugar sombrío y oscuro. Y aunque no existe nadie mejor haciendo lo que el hace, esta cansado, deprimido, cree que en la vida hay algo más, algo que no conoce y que se encuentra mas allá de los limites de halloweentown. Por favor, levanten la mano los que alguna vez se han sentido así.

Obsesión.

En su búsqueda, casi por accidente, descubre algo nuevo, alegre y colorido, un mundo colorido al cual cree que pertenece y hace todo lo posible por realizar su sueño, a pesar de que todos a su alrededor le decían que era una mala idea, que el trancazo para despertarse iba a ser muy fuerte, siguió adelante con su plan. Una vez más, levanten su mano los que han experimentado esto con una novia, la compra de algo nuevo, un viaje, un trabajo… ¿Quién dijo yo?

El Duro despertar.

En efecto, Jack se da cuenta que ha cometido un grave error y yace tirado en el suelo malherido, atestiguando como su vida y la de muchos mas se hacen pedazos. Sin embargo, Jack retoma el camino, y a fuerza de buena voluntad reconoce su error y trabaja para remediar la situación, al mismo tiempo que, por ende, encuentra su lugar en el mundo y lo acepta con valentía. ¿Algún valiente que lo reconozca?

A partir del día de hoy, muchos tendremos la oportunidad de ver por fin El Extraño mundo de Jack en una sala cinematográfica, lo cual, ya de por si sería todo un deleite, pero ahora los de Disney nos sorprenden sometiendo a la cinta a un proceso que la convierte a tercera dimensión y relanzándola mundialmente. Dándonos la oportunidad de descubrir, volver a disfrutar, reconocer la cinta y tal vez reconocernos a nosotros mismos como parte de esta entrañable leyenda que muchos llevamos en el corazón.