En el hoyo.
Si Estados Unidos tiene su Fahrenheit 9/11 y Francia su Marcha de los pingüinos, México ya puede presumir de tener un documental estrella con En el Hoyo. El documental filmado por Juan Carlos Rulfo, que ha recorrido ya varios festivales y que incluso se llevo el Gran Premio del Jurado de Sundance.
Un buen día, la colonia donde Rulfo vivía fue invadida por un aparatoso grupo de constructores, que incluso convirtieron la zona del periférico del D. F. en una zona de desastre, el motivo, ya todos lo sabían, la construcción del polémico Segundo Piso, que para aquel entonces, antes de que se iniciara la obra ya había sido tema de largas discusiones políticas.
Un buen día, la colonia donde Rulfo vivía fue invadida por un aparatoso grupo de constructores, que incluso convirtieron la zona del periférico del D. F. en una zona de desastre, el motivo, ya todos lo sabían, la construcción del polémico Segundo Piso, que para aquel entonces, antes de que se iniciara la obra ya había sido tema de largas discusiones políticas.
© La Media Luna
Rulfo tomo su cámara y se lanzó a explorar que demonios estaba pasando con esto, el resultado fue un encuentro cercano con la clase obrera trabajadora de México un grupo de hombres y algunas mujeres que a pesar de la fuerte carga de trabajo y la dura vida que les toca cincelar, aún así encuentran el momento perfecto para reventarse una cumbia y apagar las velitas de algún pastel.
Una clase de hombres fuertes, que al preguntarles si tienen miedo escalar altísimas estructuras para realizar sus labores con la mínima protección solo atinan a reírse y a decir: "Me da mas miedo no tener para tragar el sábado."
Un puñado de personajes inolvidables, que ningún reality show hubiera podido descubrir, que no tienen otra opción mas que atorarle fuerte a la chamba, que no saben nada de política, ni mucho menos de finanzas, pero eso no es ningún impedimento para que así de repente en sencillas palabras se avientan todo un discurso de proporciones filosóficas capaz de aleccionar a cualquiera y que aunque sonrían con entusiasmo uno puede ver una fuerte lucha detrás de sus ojos, tratando de vencer en la batalla diaria, pues es sabido por todos ellos que cada día se jugaban el pellejo.
Una clase de hombres fuertes, que al preguntarles si tienen miedo escalar altísimas estructuras para realizar sus labores con la mínima protección solo atinan a reírse y a decir: "Me da mas miedo no tener para tragar el sábado."
Un puñado de personajes inolvidables, que ningún reality show hubiera podido descubrir, que no tienen otra opción mas que atorarle fuerte a la chamba, que no saben nada de política, ni mucho menos de finanzas, pero eso no es ningún impedimento para que así de repente en sencillas palabras se avientan todo un discurso de proporciones filosóficas capaz de aleccionar a cualquiera y que aunque sonrían con entusiasmo uno puede ver una fuerte lucha detrás de sus ojos, tratando de vencer en la batalla diaria, pues es sabido por todos ellos que cada día se jugaban el pellejo.
Como lo decía Natividad, la guardia nocturna encargada de la vigilancia del puente: "una obra así de grande, no puede irse limpia, tiene a fuerzas que llevarse a uno... esta ya se ha llevado a muchos... el dueño de todo esto a de tener un pacto con el diablo, que a cambio de levantar el puente tiene que llevarse a varios... A varios de mis compañeros muertos ya los han visto por ahí penando."
Los testimonios de pronto se toman un receso y de pronto la cámara se acelera y nos muestran como poco a poco, piedra por piedra se va levantando un pequeño tramo, un paso mas, que los acerca al final de la jornada. Los sonidos de La Capital, el tráfico, el silbato del tránsito, un claxon se convierten en una sinfonía que acompaña a nuestros héroes sin descanso.
Los testimonios de pronto se toman un receso y de pronto la cámara se acelera y nos muestran como poco a poco, piedra por piedra se va levantando un pequeño tramo, un paso mas, que los acerca al final de la jornada. Los sonidos de La Capital, el tráfico, el silbato del tránsito, un claxon se convierten en una sinfonía que acompaña a nuestros héroes sin descanso.
Y como no ha de ser la clase trabajadora la protagonista de uno de los mejores documentales mexicanos actuales, si son ellos quienes construyen este país con sus propias manos, sin importar, ni politizar su trabajo, a ellos no les importa mucho quien es el candidato y que dijo o que hizo, a ellos lo que más les importa es encontrarse a un mejor país al amanecer, uno mas justo.
Y aunque sin duda es triste, aunque esperanzador ver todo esto en la pantalla, sin duda es todavía más triste ver las reacciones de cierta parte del público que encuentran gracioso, lo que estando del otro lado les parecería trágico. Sin duda alguna, preferiría estar rodeado de albañiles en una obra, que de supuestos intelectuales en una sala de cine, sin duda sería mas enriquecedor, interesante y divertido.
¡Brindo con caguama y pulque por todos ellos!
Yo opino: ****.
En el hoyo.
(aka In the Pit, México, 2006.)
Dir.: Juan Carlos Rulfo.
Y aunque sin duda es triste, aunque esperanzador ver todo esto en la pantalla, sin duda es todavía más triste ver las reacciones de cierta parte del público que encuentran gracioso, lo que estando del otro lado les parecería trágico. Sin duda alguna, preferiría estar rodeado de albañiles en una obra, que de supuestos intelectuales en una sala de cine, sin duda sería mas enriquecedor, interesante y divertido.
¡Brindo con caguama y pulque por todos ellos!
Yo opino: ****.
En el hoyo.
(aka In the Pit, México, 2006.)
Dir.: Juan Carlos Rulfo.
Comentarios
Acuerdate. Y me dices donde verla pa verla. JAJA
cuidate.
Documental es solo el genero... como el que parece que vamos a hacer.