Renovarse y vivir.

En estos últimos días, cuando encuentro un momento de paz y tranquilidad y me pongo a pensar en todo lo que he vivido en el último mes, me resulta todo muy extraño e irreconocible, es casi como si estuviera viviendo la vida de alguien más, alguien más afortunado y dichoso de lo que yo suelo ser.

Desde el pasado 30 de Septiembre soy padre de una niña hermosa y bella que lleva por nombre Frida Maryani que ocupa mis días y noches entre arrullos y biberones, aunque hasta ahora mi pasatiempo favorito con ella es sentarme a observarla, no importa si esta dormida o despierta y llenar mis ojos de sus grandes y bonitos ojos. Es increíble todo lo que en poco más de un mes nos ha echo sentir a mis esposa Paola y a mi, este pequeño ser.

Con todo y cuna emprendimos una nueva mudanza, la cual espero que con un poco de suerte sea la última y la definitiva, todavía no termino de encontrar las cosas que se me perdieron en el transcurso y todavía sigo encontrandome cosas que creía perdidas desde hace mucho, así que seguire al pendiente a ver que más sorpresas tiene la casa. Y con un poco de suerte pueda encontrar un rinconcito donde acomodar mi equipo bloggeril.

Mañama sabado por primera vez veremos con público mi proyecto José Tercero, del cual no les he contado mucho, pero pueden encontrar en el respectivo link. Toda esta aventura empezó hace ya mucho tiempo y nos ha costado mucho trabajo y esfuerzo, a veces la pequeñez del proyecto me hace sentir que todo ha sido un juego que llegó demasiado lejos, pero cuando lo pienso mejor me sorprendo del resultado y del cariño que mucha gente ha puesto en el. Todo lo que he aprendido como ser humano y como el artista que creo ser gracias a José Tercero no me lo hubiera podido enseñar ninguna escuela de cine o de vida... Y pensar que aún tengo mucho por aprender. Que emocionante será que por fin veremos la película a oscuras en una pequeña sala, acompañados de amigos, familiares y hasta gente que no conocemos. Ojala que todos obtenga algo positivo de José Tercero.

Por todo esto y más ya no soy el mismo y aquel header de Lost in translation con el que tanto me identifiqué por un buen tiempo, dejo de definir mi estatus personal por lo que me dí a la tarea de quitarle las pulgas a este blog y darle un nuevo aire, que buena falta le hacia.

Así ya estamos de regreso y con muchas cosas que contar, pero seamos pacientes y vayamos por partes. Nos leemos pronto.

Y el soundtrack oficial para este post es: