El Mago y Carambola.

Nada mejor para festejar las pasadas fechas patrias que una noche de cine mexicano, para mi mala suerte el pasado 14 de Septiembre en Cinemark solo pude ver dos cintas que espero tengan pronto la oportunidad de ver, aquí se las comento.

El Mago.

Tadeo es un mago callejero que intenta hacer pasos mágicos en alguna plaza de la Capital, ayudado por su invidente amigo Félix. Un mal día descubre que padece de una enfermedad terminal y que sus días están por terminar. Lo que lo incita a abrir su ropero y redescubrir viejos secretos ahí guardados, regresa a los bares donde antes vivía retratando a las estrellas para reencontrarse con viejos amigos, una vieja amante y para tratar de descubrir, por que su vida, de pronto, se fue al carajo.

Al presenciar una historia así, uno esperaría ver un relato triste y deprimente, enmarcado por el ambiente nocturno del Distrito Federal, generalmente retratado con sordidez, sin embargo esta historia esta contada con un tono mas optimista, casi tan optimista como el protagonista, que intenta rehacer sus días. Un tono en el que la magia hace posible sonreír y luego llorar convirtiendo a la cinta en un excelente y emotivo viaje.

Esta es una cinta bastante atípica y en gran parte es gracias a la forma en la que el protagonista se relaciona con los de mas personajes, especialmente con su inseparable amigo Félix, ambos envueltos en una relación de sincera amistad, de esas que rara vez se ve en el cine últimamente y mas rara vez se ve en la vida real.

Hacer una película, como El Mago, en un país de incrédulos como este, hace falta un verdadero acto de magia.

Yo opino: ***.

(El Mago, Jaime Aparicio, México, 2004.)


Carambola.

Otra cinta de la extrañamente se a hablado muy poco, injustamente, es Carambola, escrita y dirigida por Kart Hollander, un director desconocido en la que retrata el mundo de los billares. Estelarizada por Daniel Martínez, Jesús Ochoa y Diego Luna, cuenta la historia de El Vago, un… vago, que tras ganarse un billar en un juego de carambola, pone manos a la obra con tal de convertir el lugar de mala muerte que ha recibido como premio, en un antro de moda, con la ayuda El Perro y El Mexicano, Luna y Ochoa respectivamente. Sin embargo, en lugar de ayudarlo, pareciera que ambos quisieran que El Vago perdiera de nuevo el billar.

La cinta que se tardo varios años en poder llegar a las salas cinematográficas, tanto que resulte sorpresivo ver la presencia del legendario Roberto Cobo, con un personaje menor, pero representado con la maestría que solo varias décadas de trabajo en el cine le pudieron dar.

Una cinta que resulta bastante divertida, al contar con el trabajo del Chucho Ochoa quien se gana varias carcajadas a lo largo de la historia, contribuyendo al humor bien cuidado que evitaran que esta, se convirtiera en una cinta de humor grotesco en el que suelen caer algunas cintas de este tipo.

Sin duda una de las películas mas "cool" que en México se han dado últimamente.

Yo opino: **.

(Carambola, Kurt Hollander, México, 2003.)